Cuando empiezas de nuevo en un negocio te meten muchas trolas.
Me acuerdo de un consejo de un gurú de esos que enseñan a montar negocios por Internet a uno de sus alumnos.
Era un consejo pésimo.
Una mierd de consejo.
El sistema de este gurú se basaba en escribir muchísimo. A muerte. Más que lo que escribe Stephen King, que ya es decir…
Que mínimo había que hacer dos artículos semanales para el blog. Eso de mínimo, pero que lo ideal era todos los días un artículo.
Entonces el alumno, que es un tipo bastante espabilado, le preguntó si no era mejor escribir algo menos, pero que los artículos estuviesen optimizados para SEO y así que Google fuese trayendo tráfico.
El gurú le contestó que no, que el SEO era una tontería y que se olvidase de eso.
Es posible que estés una temporada produciendo contenido como si se te fuese la vida en ello, pero con el tiempo eso es insostenible.
Pero claro, aquí hay algo importante…
Al gurú le daba igual el largo plazo.
Si el negocio no funcionaba en un año le traía sin cuidado, porque el curso duraba 3 meses. Así que lo que interesaba es que los alumnos viesen resultados (o migajas de pan) en el corto plazo. Le dejaban un testimonio de cómo les había cambiado la vida y a seguir con otra serie de incautos.
Nada mal para él.
Nada bien para el resto.
Con esto no quiero decir que no haya que hacer cosas a corto plazo. Hay que hacerlas, sí, pero siendo conscientes de que no es algo que se pueda ni se deba mantener en el tiempo.
En la formación del martes hablo de esto. De estrategias y tácticas a corto plazo. Esas que te pueden ayudar a arrancar un negocio o salir de un bache llamando la atención de mucha gente.
Cuales funcionan, cuales no.
Cuando mantenerlas, cuando huir de ellas.
Para recibir la formación, este enlace:
Estrategias rápidas para negocios con valores
Lorena S.
PD: Hoy es la fecha límite para formarte con el precio de lanzamiento (para siempre). Mañana costará casi el doble. Y no, no habrá ofertas, descuentos, aniversarios ni rebajas…